A pesar de que había estado enfermo en el último año, aquejado por su corazón, ‘El Brujo’ tuvo un año prolífico. Grabó con Alexis Lozano, director de Guayacán, un disco de música chocoana y son, que no alcanzó a ver publicado. «Él sentía que se iba a ir y por eso quería que el CD saliera rápido», dice Douglas Cújar, su amigo y asesor cultural de la Fundación Fiesta Franciscana de Quibdó.
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El Brujo, un sobrenombre que significa hombre que sabe mucho, compuso por lo menos dos éxitos del grupo Guayacán: Vano retorno (que le hizo a un mujer que lo abandonó) y Son cepillado. Además, su canción Nostalgia africana fue grabada por Yuri Buenaventura.
En sus 70 años de vida musical, el maestro conformó siete orquestas: Los negritos del ritmo, El Brujo y su banda, Grupo Africanto, Sukundún, Raza, Los brujos del son y El brujo y su timba.
«Con El Brujo se cometió una gran injusticia: murió con la mayoría de su música inédita. Tenía más de 800 composiciones propias», dice el gestor cultural Lucas Silva, que estaba haciendo un documental sobre la vida y la obra del maestro y también un disco de música tradicional.
Alfonso Córdoba empezó a componer a los 14 años y desde muy niño hacía tallas de madera que intentaban acercase a las imágenes de los santos que veía expuestas en las iglesias. Su padre era boga en tiempos en los que este oficio implicaba gran destreza con la palabra y con la música. Fue gracias a un compañero de trabajo de su padre, quien visitaba a la familia en el tradicional barrio La Yesquita, de Quibdó, que El Brujo estuvo expuesto a los relatos sobre los lugareños. Muchas de las historias que escuchó las convirtió en lo que él llamaba canticuentos.
«El Brujo fue un orfebre, el mejor orfebre de Colombia. Trabajaba el oro como nadie. Su estilo era la filigrana. Además, fue un gran cantante de la música de su tiempo. Pero, sobre todo, fue tremendo compositor», comenta Nino Caicedo, su amigo y compositor de muchos éxitos de Guayacán.
El Brujo recibió muchos galardones, como el Premio Nacional de Joyería. El año pasado el prestigioso festival de música del Pacífico Petronio Álvarez le hizo un homenaje.