La población de los barrios Isla de la Paz y la Cima, ubicados en la comuna 6 del Distrito de Buenaventura, ha padecido constantes episodios de represión que evidencian un proceso sistemático despojo territorial que tiene de fondo la ampliación de la plataforma logística portuaria. La construcción de la vía alterna se acompañó del montaje progresivo de patios de estacionamiento (parqueaderos de mulas) y bodegas de contenedores, al tiempo que grandes poderes económicos y armados se movilizaron rápidamente para hacerse al control de vastos territorios ocupados tradicionalmente por las comunidades, espacios en los cuales éstas han recreado sus prácticas culturales y socio-productivas.

En los últimos 16 años líderes y moradores han vivido una desproporcionada y heroica batalla jurídica para frenar el despojo territorial, que se acompaña de una férrea resistencia pacífica colectiva que suple los vacíos de un Estado débil, incapaz de adoptar medidas que protejan de manera efectiva los derechos de estas comunidades. Temistocles Machado, líder comunal y miembro del Proceso de Comunidades Negras – PCN, representaba un símbolo de la resistencia por la defensa de los territorios en Buenaventura.

Para Temistocles o “Don Temis” como le decíamos sus compañeros de lucha, era claro que la institucionalidad del Estado – en particular la administración local – estaba comprometida en las violaciones múltiples de los derechos territoriales de las comunidades, no sólo por su inacción en materia de protección y garantía de derechos, sino también, porque servían de actores de agenciamiento del despojo del cual eran objeto, al favorecer los intereses de los particulares que en repetidas ocasiones intimidaban a la comunidad, incluso, a través de funcionarios públicos. Así lo afirmó en entrevista concedida a uno de sus compañeros el 8 de noviembre de 2016, sentado en

la propiedad que aún no le habían logrado arrebatar, que tanto había defendido, justo en la que fue ultimado este domingo en horas de la tarde;

…[sabemos]por los hechos transcurridos que de parte de la Alcaldía no se tiene mucha esperanza para el desarrollo de nosotros. Nosotros no soñamos con un desarrollo de parte de la Alcaldía … [ni con] el fortalecimiento y la defensa del territorio, porque todos sabemos que la misma Alcaldía desconoce el derecho que tienen las comunidades y se lo da a unos particulares, a unos extraños. […] El hecho es que ellos desconocen los derechos y han querido entregar los territorios a los particulares1.

 Temistocles Machado encarnaba el liderazgo comunitario más visible en torno al cual se adelanta una batalla jurídica por la defensa del territorio acompañada por el Comité Interorganizacional de Buenaventura. Su nombre figura en las distintas estrategias jurídicas que se adelantan en Buga y Bogotá, puesto que la fragilidad de la justicia local ante los poderes económico/mafiosos/criminales inclinan siempre la balanza en sentido contrario a las pretensiones comunitarias, en palabras de “Don Temis” …

…esas acciones jurídicas se encuentran bastante “engorrosas” porque para nadie es un secreto que Buenaventura en el Valle está catalogado como uno de los epicentros de la corrupción, donde hay unos carteles diseñados para despojar a las comunidades de los territorios y esa estrategia de despojo va confabulada con la Alcaldía y no solamente con ésta, sino con varias instituciones o entidades del gobierno que se han prestado para esto e inclusive, funcionarios del Agustín Codazzi, porque nosotros aquí no hemos tenido apoyo real de Procuraduría, de la Personería ni de la Defensoría de aquí”2.

Para “Don Temis” su vida y la de todos en Isla de La Paz era la más fiel expresión de resistencia comunitaria, dejaba entre ver en sus palabras que sólo la resistencia asegura la pervivencia, por eso participó con convicción y entrega en la organización y desarrollo del Paro Cívico, siendo una de las voces elocuentes en la negociación realizada con el Gobierno Nacional en la Mesa de Territorio. Quizás en la alusión al proceso de resistencia en su comunidad pueden hallarse pistas de sus victimarios intelectuales;

“Si no se hubiera dado la resistencia nuestra, aquí no existiría comunidad. Aquí existiría, posiblemente, Jairo Salamandra Ochoa, la familia Game, la familia Lopera, pero la comunidad no existiría y habría una oficina en la entrada

 

Ha llegado la hora de asegurar nuestra pervivencia por los medios que sean necesarios.

¡El pueblo no se rendirá Don Temis!