Gobierno colombiano asumió compromiso para mejorar situación
 
La violencia contra las comunidades afrodescendientes en Colombia se ha intensificado en los últimos meses, afirmaron hoy la Oficina en Washington para Asuntos Latinoamericanos (WOLA) y la Asociación Nacional de Afrocolombianos Desplazados (Afrodes) durante una conferencia de prensa Washington , D.C.
 
Desde mayo de 2010, cuando WOLA, AFRODES y cerca de 60 organizaciones que trabajan el tema del derecho a territorios afrocolombianos empezaron a recibir amenazas de muerte, se desató una ola de asesinatos contra líderes afrocolombianos. Según un nuevo reporte de AFRODES  y Global Rights, titulado “Bicentenario: ¡Nada que Celebrar!”, más de 42 líderes afrocolombianos han sido asesinados desde 1996, de ellos, seis desde que comenzaron las amenazas en mayo.
 
“Detrás de la aparente calma, está surgiendo una ola de violencia contra nosotros”, dijo Luz Marina Becerra, Presidenta de AFRODES. “El modo operandi de los paramilitares ha cambiado. Las masacres ya no se hacen en un día, sino a lo largo de los meses con asesinatos selectivos contra los líderes de las comunidades afrocolombianas”.
 
El pasado jueves, 21 de octubre, el Vicepresidente de Colombia Angelino Garzón, expresó, en nombre del gobierno de Colombia y del Presidente Juan Manuel Santos, su absoluto rechazo a las amenazas que han sufrido AFRODES y WOLA, y pidió a las autoridades a que estos hechos sean investigados a profundidad.
 
“Este pronunciamiento es un cambio y es importante. Esperamos que sea un compromiso del Gobierno de Colombia para investigar estos asesinatos y castigar a los culpables”, dijo Joy Olson , Directora Ejecutiva de WOLA. “Les tomamos la palabra”.
 
Adicionalmente, AFRODES y WOLA invitan al Gobierno de Colombia a brindar más atención a la crisis existente en Chocó (en especial en Quibdó, San Juan , Baudo), Valle del Cauca (especialmente en Buenaventura ), Nariño (en especial Tumaco) y Norte del Cauca. Los grupos paramilitares están luchando para lograr la explotación ilegal de los recursos naturales de estas tierras, tales como oro y cobre, entre otros. Aquellos que se oponen a esta explotación descontrolada y excesiva de sus tierras están siendo expulsados violentamente de sus hogares o desaparecidos.
 
“Somos ricos por nuestras tierras, pero no tenemos nada, sólo muertos. Nos amenazan verbalmente, nos persiguen y asesinan, todo por oponernos a la explotación de las riquezas en nuestras tierras”, dijo Luz Marina Becerra, Presidenta de AFRODES. “Cuando estos grupos se acaben las riquezas de las tierras de Colombia, no sólo perderemos nosotros, perderá toda Colombia ”.
 
AFRODES y WOLA también valoran como un paso positivo el acuerdo del Gobierno de Colombia de crear una mesa de diálogo para hacerle frente a la discriminación estructural que enfrentan las comunidades afrocolombianas, la expulsión de afrodescendientes de sus tierras y la implementación de mecanismos de protección para los líderes comunitarios- temas en los que se ha pronunciado ya la Corte Constitucional. Ambas organizaciones invitan al gobierno a llevar a cabo dicha mesa de dialogo antes de que acabe el año 2010.
 
La conferencia de prensa se dio en el marco de la entrega del premio anual de derechos humanos de WOLA. Este año WOLA está galardonando con su premio a AFRODES, así como también a la ex Presidenta chilena, Michelle Bachelet. El premio será otorgado en la noche del martes, 26 de octubre, en la sede de la Organización de Estados Americanos (OEA).
 
“Galardonamos a AFRODES por la fuerza con la que se ha opuesto a los atropellos dirigidos desproporcionadamente hacia la población afrocolombiana y la visión con la que ha ideado soluciones para una mejor Colombia ”, dijo Joy Olson de WOLA. “Su trabajo a favor de la dignidad humana viene con un precio muy alto a su seguridad personal”.
 
Durante dicha ceremonia, WOLA también otorgará su premio WOLA-DUKE al mejor libro del año, en esta ocasión, “Hostage Nation: Colombia ‘s Guerrilla Army and the Failed War on Drugs», escrito por Victoria Bruce, Karin Hayes y Jorge Enrique Botero. El libro cuenta la historia de varias personas secuestradas en Colombia .
 
“No hay que olvidarnos de las personas secuestradas en Colombia ”, dijo Joy Olson de WOLA. “Este libro nos recuerda el horror que viven los secuestrados en Colombia y que deben ser liberados”.